lunes, 12 de octubre de 2009

¿A qué juegan los tahúres?

El día 06/10/09 tuvo lugar la reunión del Comité Permanente con la empresa para reabrir las negociaciones acerca del traslado a la T1.

El balance de la reunión ha sido muy negativo demostrándose una vez más que la única intención de la empresa, para no comenzar a negociar antes del traslado a la nueva terminal, ha sido la de ganar tiempo y así poder obtener réditos de su habitual política de hechos consumados.

La empresa presentó como aval para la negociación el acuerdo de mínimos obtenido para los trabajadores de la empresa Iberia. En dicho acuerdo los trabajadores de Iberia tendrán un reloj de fichar para la entrada y la salida en la sala de control de presencia y otro en los vestuarios única y exclusivamente para la salida. El fichaje de salida en la sala de control de presencia o en el vestuario quedará sujeto al desarrollo de la operativa en ese día y a la autorización de los mandos para abandonar el puesto de trabajo antes de la hora de plegar.

 CGT no entiende ni va aceptar la tutela de otro comité ajeno a los trabajadores de Groundforce ni que se den por válidos los acuerdos de otros comités en otras empresas de la UTE para con los trabajadores de Groundforce. Esta actitud empresarial es malintencionada y es un acto de traición hacia el comité de empresa de Groundforce.

Desde CGT propusimos en su momento a los demás sindicatos que en la negociación con la empresa se solicitara una compensación en tiempo a favor del trabajador tanto a la entrada como a la salida del trabajo, la ubicación del reloj de fichar en los vestuarios, una compensación económica adicional y parking gratuito a cargo de la empresa. Ayer estas propuestas volvieron a aparecer sobre la mesa pero la habitual arrogancia, prepotencia y “sobradurismo” de la empresa, pretendiendo que todo el coste del traslado corra a cargo del trabajador, ha imposibilitado avance alguno en la negociación. Y ni tan siquiera se han conformado con eso, sino que con el mayor de los despotismos y buscando guerra se ha incidido por parte de la empresa en que a partir de ahora va a haber un mayor control y recorte en los tiempos de refrigerio y de comida.

CGT sigue abierto al diálogo y continuará luchando para conseguir un acuerdo óptimo para los trabajadores de Groundforce. No obstante, si la empresa continúa con nula actitud negociadora tomaremos las medidas que creamos oportunas (movilizaciones y/o convocatoria de huelga), al alcance también de los demás sindicatos, para hacer prevalecer los derechos de los trabajadores.

Juegan con todo y con todos.

SALUD.

Aeroport del Prat, 07 octubre 2009


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